jueves, 29 de octubre de 2009

MIAOLE CONTANDO A SU ABUELA LA REUNION DE ABD AL-RAHMAN UN MES ANTES DE LA MUERTE DE PASCAL MONTORO (TRADUCIDO DEL CHINO)

     Estábamos todos, Yusuf, Djibril y los otros, esperando a que llegara Daniel. Ninguno nos queríamos hacer ilusiones, Yusuf no hacía más que repetir “¿Por qué nos van a dar la obra esta vez si no lo han hecho antes?”. El único que intentaba darnos ánimos era Djibril, decía “Alguna vez tendrá que cambiar nuestra suerte” y Yusuf “No es cuestión de suerte, es cuestión de Pascal Montoro”.
     Y luego nadie habló durante un buen rato, cada uno pensaba en las facturas que pagaría si nos dieran la obra.
     Al final llegó Daniel y nos dio la mala noticia. Otra obra que dan a Pascal Montoro. Menudo hijo de mala… ¡Ay! Perdona abuela. Pero es que no es justo que siempre gane él. Sí, ya lo sé, me los has dicho muchas veces, no ganará siempre. Pero como siga ganando un poco más Abd Al-Rahman se acabó. Caput.
Bueno, pues Daniel llegó y dijo que le habían dado la obra a Pascal Montoro. Los chicos se pusieron como locos. Decían que era imposible que Motoro hubiera hecho una oferta mejor que la nuestra. Y Daniel dijo que no le hacía falta, que la obra ya era suya antes de la decisión oficial porque esta mañana había pasado por el immueble y los arquitectos de Montoro ya estaban allí tomando medidas.
     Entonces los chicos se pusieron a gritar, que si eso no era justo, que si Pascal Montoro es un cabrón (eso no lo digo yo abuela lo decía Francisco), que si merecería que le dieran una paliza, que si habría que matarlo. Todo eso decían.
     Al final cuando se calmaron, Djibril dijo que por mucho que gritáramos la obra no la íbamos a recuperar. Sí abuela ya sé que Djibril es el más sensato. Y Daniel añadió que Djibril tenía razón y que iba a hacer una reclamación en el ayuntamiento esta misma tarde alegando que nuestra oferta es más barata que la de Montoro. Los chicos respondieron que eso no serviría para nada y que los políticos son todos unos corruptos que se dejan comprar por un puñado de dinero. Yo me acordé entonces que papá decía lo mismo de los políticos en China.
     Daniel preguntó entonces qué es lo que deberíamos hacer para no ir a la quiebra. Y nadie respondió. Ninguno, ni siquiera Yusuf que siempre sabe de todo, supo qué decir. Entonces empezaron a recoger las herramientas, que se quedaron otro día sin servir, y a irse cada uno a su casa a explicar a la familia las noticias que a nadie le gusta explicar.
     Así que en esas estamos abuela. ¿Cuánto dinero nos queda? Tenemos que aguantar por lo menos dos semanas hasta que el ayuntamiento responda a nuestra reclamación.
     Y después a freír nems.

RESPUESTA DE LA ABUELA
     Tus amigos y tú tendríais que dejar de alborotaros como niños asustados y empezar a comportaros como hombres.

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